¿Te preguntas si tus estudiantes o hijos deberían aprender en sillas de puff para niños? ¡La respuesta podría sorprenderte! La primera silla de puff salió en 1969, y desde entonces, se han convertido en una de las formas más populares para que los niños vean televisión, lean cómics, jueguen videojuegos y más. Estas sillas ultracómodas suelen ser para relajarse y pasar el rato. Sin embargo, la evidencia muestra que también pueden ser excelentes para situaciones académicas. Si has estado evitando comprar algunos hermosos puffs, podrías querer reconsiderarlo. En esta guía, te daremos la información que necesitas para decidir si estas sillas son adecuadas para tu aula o guardería. ¡Sigue leyendo para obtener respuestas a tus preguntas sobre los puffs!
por qué el mobiliario escolar es tan importante
Los expertos coinciden en que el mobiliario escolar es una parte integral del proceso de aprendizaje. El mobiliario escolar adecuado permite a los estudiantes estar preparados para aprender lo que necesitan. Todos los días, los niños pasan alrededor de seis horas, si no más, sentados en un escritorio. Si el asiento no es cómodo, los niños pueden tener dificultades para concentrarse. Pero aún peor, los niños pueden comenzar a desarrollar problemas de espalda y otros problemas de salud como resultado de un mobiliario inadecuado. Así es, los adultos no son los únicos que pueden sufrir problemas de salud causados por largas horas en un escritorio. Al igual que un adulto en un trabajo de oficina, un niño en una silla de escritorio durante horas todos los días puede comenzar a sentir dolor, rigidez y más problemas físicos.
¿Los niños cómodos aprenden mejor?
Además del riesgo de problemas físicos, muchas sillas de escritorio tradicionales tienen otro inconveniente: no son cómodas para sentarse durante largos períodos. Piensa en las sillas de escritorio de tu infancia. Probablemente estaban hechas de un material duro como plástico, metal o madera. Sentarse en ellas te hacía moverte para encontrar la posición más cómoda. Cuando los niños sienten que no pueden quedarse quietos debido a sillas incómodas, esto puede interrumpir el proceso de aprendizaje. No podrán concentrarse y obtener la información que necesitan de una clase. Las sillas ideales estarán contorneadas para coincidir con las curvas naturales de la espalda, reduciendo este malestar. Sin embargo, la mayoría de los muebles ergonómicos están fuera del rango de precios para escuelas, guarderías y otros lugares educativos. ¿Es posible que las sillas tipo puff para niños puedan ayudar?
beneficios del puff
Hay bastantes cosas que los pufs para aulas pueden hacer para mejorar un entorno de aprendizaje. También son más rentables que algunas sillas ergonómicas elegantes. Veamos los detalles.
1. promover la relajación
Un niño con una mente relajada aprende mejor. Cuando alguien experimenta malestar físico, el cerebro no puede relajarse: está enfocado en hacer la situación más cómoda. Una vez que el cerebro se relaja, el enfoque del estudiante puede cambiar al aprendizaje. Las sillas de bolsa de frijoles son naturalmente cómodas, por lo que promueven el aprendizaje. Son suaves y atractivas para niños de todas las edades. Sentarse en una no se siente como una tarea -- los niños a menudo están felices de estar allí ya que una silla de bolsa de frijoles se siente diferente de las sillas que usualmente asocian con la escuela. Usar sillas de bolsa de frijoles cómodas puede hacerlos más receptivos al proceso de aprendizaje.
2. fácil de limpiar
A los profesores les encantará que estas sillas también sean muy fáciles de limpiar, con exteriores resistentes que evitan daños. Cualquiera que trabaje con niños sabe que son desordenados. Sin embargo, una silla tipo puff se puede limpiar fácilmente con un desinfectante al final de cada día.
3. sentirse seguro
A los niños les gusta sentirse seguros y cómodos en su entorno. Las cosas nuevas pueden dar miedo. Dado que ya están encontrando nuevos conceptos, y tal vez incluso personas nuevas, mientras aprenden, es importante asegurarse de que el mobiliario no sea intimidante. Un puff parece un juguete, por lo que es cómodo y familiar. La superficie suave también se siente segura: no es como sentarse en una silla en algún lugar aterrador, como el consultorio del médico. Esta familiaridad ayuda a reducir la ansiedad que a menudo provoca el ambiente del aula.
4. fácil de mover
Es mejor mantener el día dinámico si estás trabajando en un aula. Los niños pueden aprender mejor si cambian de actividad con frecuencia y se levantan y mueven entre tareas sentadas. Dado que los pufs son fáciles de mover, te permiten reorganizar tu aula tantas veces como necesites a lo largo del día. Los niños mayores incluso pueden caminar con sus sillas de puf, lo cual es una actividad divertida en sí misma. Esto te ayuda a mantener el aula atractiva durante todo el día.
5. experiencia sensorial
Los niños más pequeños todavía están aprendiendo a usar sus sentidos para interactuar con el entorno. Las experiencias sensoriales pueden ayudarles a aprender al hacerlos participantes activos, lo cual es útil con estudiantes en el espectro autista y aquellos con trastornos de déficit de atención. Los pufs ofrecen una gran experiencia para el sentido del tacto. Tienen una textura interesante que puede despertar muchas preguntas de los estudiantes sobre su construcción. Y si los niños quieren correr y saltar sobre los pufs, no se lastimarán, por lo que estas sillas promueven la interacción.
6. muchos tamaños diferentes
Puedes conseguir sillas de puff en diferentes tamaños, así como algunas formas, para satisfacer las necesidades de tu aula. Las sillas más pequeñas son más adecuadas para niños más pequeños, mientras que las sillas más grandes pueden funcionar para preadolescentes, adolescentes e incluso adultos. También puedes conseguir puffs para dos personas donde los niños pueden compartir el asiento con sus amigos.
7. promover la lectura
Dado que estas sillas son cómodas y divertidas para sentarse, es más probable que los niños se sumerjan en actividades estacionarias, como la lectura. Si un niño parece no querer quedarse quieto, podría ser simplemente una señal de que su silla no es cómoda. Algunas escuelas encuentran que los pufs hacen que la lectura sea más divertida para sus estudiantes.
¿Probarás sillas de bolsa de frijoles para niños?
Si estás a cargo del mobiliario en la guardería, escuela o en cualquier lugar donde los niños vienen a aprender; las sillas de puff pueden ayudarte a alcanzar tus objetivos. ¡Los estudiantes relajados y cómodos aprenden mucho más rápido que el resto! ¿Estás buscando un lugar para comprar sillas de puff para niños? Encuentra un sofá de puff para niños para tu hijo hoy mismo.